Rodolfo Nieto

BIOGRAFÍA - RODOLFO NIETO (Oaxaca, 1936 – Ciudad de México, 1985)

Rodolfo Nieto nació en Oaxaca el 13 de julio de 1936. Fue un pintor que formó parte de la generación de la ruptura en México. Estudió e incorporó en su obra el art brut, así como la pintura originada desde el inconsciente explorada por el grupo CoBrA en Europa.  

Rodolfo Nieto descubrió que quería ser pintor a la edad de cinco o seis años, cuando cruzaba todos los días frente al taller de un pintor de santos que restauraba yesería y dorados. Le gustaba parar y contemplar su labor. A los ocho años modelaba series de animalitos en cera negra que formaba en la mesa del comedor de su casa. 

En 1949, tras la muerte de su padre se trasladó con su familia a la Ciudad de México. Su vocación lo llevó a ingresar en la Escuela Nacional de Pintura, Escultura y Grabado "La Esmeralda” en 1953, donde estudió por dos años y siguió visitando esporádicamente. Tuvo como maestros a Carlos Orozco Romero y Santos Balmori, entre otros. Con Santos Balmori tuvo una relación muy cercana, al grado que Santos Balmori y su esposa quisieron adoptarlo, pero nunca sucedió.  En casa de Balmori, Rodolfo Nieto comía, dormía, tenía acceso a la biblioteca y pasaba largos ratos conversando. Le gustaba también visitar el mundo mágico que para él era la casa de Chucho Reyes. A sus veinte años ya se había adentrado en el estudio de la pintura de muchos de los grandes del siglo XX, como Paul Klee y Wassily Kandinsky. Juan Soriano que había regresado de su estancia en Europa, reforzó con sus amplios conocimientos, su experiencia y sus libros, el creciente interés de Nieto en la pintura contemporáneo europea.

En la Esmeralda, Rodolfo Nieto entabló amistad con sus compañeros Francisco Corzas, Luis López Loza, Tomás Parra y Fernando Ramos Prida.  También se hizo novio de una estudiante de pintura, Marta Guillermoprieto, quien después se fue por varios a años a residir en Los Angeles, California. Mantuvieron su noviazgo por carta y a su regreso en 1958 decidieron casarse. 

Rodolfo Nieto había participado en exposiciones colectivas, pero fue hasta 1959 cuando expuso individualmente por primera vez y casi simultáneamente en la Academia de San Carlos y en las Galerías Chapultepec. En esta última estaba montada una importante exposición de retrato, que incluía obras de Diego Rivera, José Clemente Orozco, Siqueiros, Dr. Atl, Roberto Montenegro, entre otros. La exposición de Nieto se encontraba en una sala aledaña, por lo que fue muy visitada. Uno de los visitantes, el coleccionista Bernard Siemiatycki, por entonces dueño de la revista Artes de México, se interesó por su obra y acudió en repetidas ocasiones a adquirir cuadros. Poco después, Siemiatycki partió a París llevando consigo 15 telas de Nieto que quería mostrar a sus amigos galeristas. La respuesta fue positiva. La Galerie de France propuso que si Nieto iba a Francia, ellos estarían al pendiente de su desarrollo. 

Rodolfo Nieto y su esposa Marta partieron en barco a París donde permanecieron la década de los 60s. Durante dos años recibieron la ayuda de Siemiatycki. Año y medio después de su llegada a París, Rodolfo Nieto ya estaba trabajando con la Galerie de France. Vivieron en su primer año en la Ciudad Universitaria de París, primero en la Casa de Grecia y luego en la Casa de México. Luego vivieron en diferentes apartamentos, ya fuera por el rumbo de l’Etoile, en Montmartre, en el Boulevard Pasteur o cerca de la estación Denfert-Rochereau.

Al poco tiempo de su llegada entablaron amistad con Francisco Toledo. En 1961, Rufino Tamayo presentó a Francisco Toledo con un curador noruego, con vistas a preparar una muestra del joven artista. Toledo a su vez propuso a Rodolfo Nieto. La exposición que reunió a ambos jóvenes artistas oaxaqueños se realizó con gran éxito en el Kunstnernes Hus de Oslo, Noruega, en 1962.

En su estancia en París se relacionó con varios escritores y poetas como Octavio Paz, André Pieyre de Mandiargues, Alejo Carpentier, Mario Vargas Llosa, Carlos Fuentes, Pablo Neruda, Julio Cortázar, y Jorge Luis Borges, de este último ilustró en 1963 la traducción al francés de su obra Manual de zoología fantástica para la editorial Maurice Nadeau. Aunque los dibujos publicados son unos cuantos por tratarse de una edición de bolsillo, el cuaderno donde los realizó llegó a contener alrededor de 80 versiones de animales fantásticos. Ese año Rodolfo Nieto recibió el premio de pintura de la Bienal de París.

En París su obra se vio influenciada por el estudio que hizo del art brut de Dubuffet, y las obras de los artistas del grupo CoBrA, que se formó en París en 1948 por artistas provenientes de los Países Bajos y Escandinavia, siendo sus principales representantes Karel Appel, Asger Jorn y Pierre Corneille, a los cuáles se sumaron: Jean Atlan, Pierre Alechinsky, Constant, Noiret y Dotremont, inventor del nombre del grupo (acrónimo de las ciudades de sus principales representantes COpenhague, Bruselas y Ámsterdam). La causa estaba clara; se marcan como objetivo aprovechar la libre expresión del inconsciente sin la interferencia ni el control del intelecto. En la obra de Rodolfo Nieto que va de 1960 a 1965, la fusión entre hombre y el animal encuentra como lugar de conformación la cara, personajes con rasgos animales, rostros indecisos entre el hombre y la bestia, y finalmente la fusión interior, cerebral, conformando su serie Zoología Mental.

La obra de Rodolfo Nieto apareció en exposiciones colectivas al lado de Hans Hartung, Pignon, Picasso, Alfred Menessier, Zao Wou Ki, Poliakoff, Pierre Soulages, Dubuffet, Burri, entre otros. En 1964, presentó la primera de varias exhibiciones individuales en la Galerie de France, galería donde exponía toda la Escuela de París. Octavio Paz escribió la presentación del catalogó de dicha exhibición. Precisamente por medio de Galerie de France, Rodolfo Nieto hizo relación con los pintores Pierre Soulanges, Pierre Alechinsky, Alfred Manessier, Zao Wou Ki y Mario Prassinos.

Hizo grabados en el taller de Mourlot, y en el célebre Atelier 17 de William Hayter, el grabador gráfico que formó a tantos artistas gráficos en Francia y Nueva York. Juan Soriano afirmó haber visto trabajar a Rodolfo Nieto también en el taller de Peter Bramsen en la calle Vielle du Temple, en el barrio de Le Marais. En 1966 hizo litografía en el taller de Michael Cassé e investigó otras técnicas pictóricas. Realizó un grupo de obras donde empleó lacas automotrices, que luego combinó con el óleo. Luego hizo una serie de collages, papel sobre papel en soporte de madera. En ese año también presentó su primera exhibición individual en la Galerie La Balance en Bruselas, Bélgica. Seguida por otra exposición individual en la Galerie de France, en 1967. Ese año también realizó una serie de dibujos a lápiz de animales en el zoológico de Basilea. Son el punto de partida de una nueva afición figurativa que se roza por un lado con el barroco mexicano y por el otro con el art brut.

En 1968, obtiene por segunda vez el premio de pintura de la Bienal de París, y regresa a México por insistencia de Marta. Al poco tiempo se separan. El vuelve a París, donde hace nuevas amistades, entre ellas el escritor argentino José Bianco. En 1969, presenta exhibiciones individuales en la Galerie de France, la Galerie La Balance y su primer exhibición individual en un museo, “Rodolfo Nieto: Laboratorio en papel” en el Museo del Palacio de Bellas Artes, Ciudad de México. Vuelve a México por temporadas. En 1970, exhibió individualmente en la Galerie Michel Cassé en París. 

Regresó definitivamente a México en 1972. Pasó la mayor parte del tiempo en la Ciudad de México, y viajó frecuentemente a Oaxaca. Nieto no dejó de pintar animales en esos años. Cabras, toros, dromedarios, camellos, rinocerontes, avestruces, plenos de ritmo y color, a los cuales se unen guajolotes, conejos, ranas, pericos que se deben al arte popular mexicano. Fruto también de su reencuentro con Oaxaca es la importante serie de personajes monolíticos que pintó a partir de 1972, en dichas obras la referencia a la escultura prehispánica es ostensible. Suscita el recuerdo del monolito de Tláloc que fuera transportado a la Ciudad de México una década anterior, pero se vincula más exactamente a la cerámica zapoteca. Por esos años Rodolfo Nieto recorrió Monte Albán, Mitla y Zaachila. En 1973, presentó su primer exhibición en el Museo de Arte Moderno de la Ciudad de México.

En 1976, se casó con Nancy Glenn, modelo norteamericana que había sido Miss California, y establece su domicilio en un departamento en Coyoacán. Su relación con Rufino y Olga Tamayo se fortalece. Ese año presentó su primer exhibición en la Galería Estela Shapiro. A partir de ese año Rodolfo Nieto dio un giro hacia otro lenguaje. Su obra gira entorno al ser humano, en un sentido casi musical, un hombre con perico, el violinista, el cellista, el marimbero, la mujer con bonsai, el hombre con televisión, el acróbata, el tragafuego, la velada, el astrónomo, el contorsionista, el gramófono, etc.

Se le preguntaba frecuentemente si era un pintor abstracto. Siempre se defendió de esa idea, y no entendía cómo podía confundírsele, ya que nunca había dejado de hacer figuración, aunque desde luego no realista. Cuenta su hermano Carlos que afirmaba entre risas: "Si yo hiciera pintura abstracta y quisiera enviar un mensaje, mejor hubiera escrito una novela". 

Cuando Rodolfo Nieto se separó de su segunda esposa, se fue a vivir a su estudio de Tacubaya. Su alcoholismo era ya muy grave. Ingresó a clínicas para desintoxicarse. Su obra La femme de l’absinthe es una imagen de la adicción que lo destruyó. Murió en la Clínica Londres de la Ciudad de México, el 24 de junio de 1985, casi a los 50 años de edad.

(Fuentes: 1. Homenaje a Rodolfo Nieto (1936-1985), Museo de Arte Contemporaneo de Monterrey, 1995, texto de Jaime Moreno Villarreal; 2. Rodolfo Nieto, Los años heroicos, por Alberto Blanco, Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, 2002; 3. Rodolfo Nieto, París 1960-1968, Galería López Quiroga, 1989)

PRINCIPALES EXPOSICIONES INDIVIDUALES